Influenza: Especulación, teoría, realidad


A partir de ese momento,
se puede decir que la peste
fue nuestro único asunto. 
Albert Camus
La peste.


Especulación
En medio de una enorme confusión y medidas grotescas tomadas por parte del gobierno federal hemos visto en los últimos días un enorme oleaje de temor. La llamada influenza porcina ha logrado paralizar una de  las ciudades más grandes del mundo: los pequeños comercios, los parques, plazas públicas y centros recreativos se han visto vacíos. Es claro que hay un peligro latente pero, ¿con que estamos tratando exactamente; un ardid político, un experimento fallido, una cortina de humo, una amenaza real? ¿De donde viene este mal, quienes son responsables, qué medidas tomar? ¿qué hacer?

Teoría 
El riesgo es real, estamos quizá, frente al inicio de una pandemia (epidemia con carácter internacional), debido a que este virus es nuevo, se trata de un virus A H1N1 (H: hemaglutinina, N: neuraminidasa) ambas son moléculas del virus que le sirven para penetrar las células del organismo huésped y diseminarse en los tejidos respiratorios.

El nuevo virus H1N1, al parecer afecta mas a niños y jóvenes porque ellos son "vírgenes" o su experiencia a estas epidemias previas o de la influenza estacional de años previos, aunque diferentes al virus porcino actual, seguramente generaron en nosotros infecciones, y a cauda de estas, nuestro cuerpo la almaceno en la memoria inmunológica mediada por nuestros anticuerpos contra diversas moléculas de superficie de los virus H1N1, por lo que no estamos del todo desprotegidos contra las fracciones moleculares constantes (las partes del virus que no han mutado) del nuevo virus, solamente tenemos desprotección contra las fracciones moleculares nuevas, estas codificadas por genes porcinos, aviarios y humanos.

La vacuna que se aplicó en los meses de octubre a diciembre del ’08, incluye tres tipos de virus: el A H1N1, y el A H3N2, y un virus tipo B que se aisló en Florida en el 2006, todos son virus de humanos, por lo tanto no nos esta protege contra este nuevo tipo, de origen porcino.

Las medidas recomendadas por la SSA, son identificar los signos y síntomas “sugestivos” de influenza: Fiebre mayor de 38°C; tos; catarro (no siempre lo hay, pero casi siempre); dolor de músculos, articulaciones; sensación de fatiga, sensación de malestar generalizado. Quien presente este cuadro básico a acudir inmediatamente a un servicio de salud, preferentemente público, porque son estos los lugares a los que se les han dotado de los tratamientos antivirales (Oseltamivir, Zanamivir).

El tratamiento oportuno puede evitar complicaciones. Las vacunas disponibles no funcionan o tendrían un valor de protección ultra-limitado, por lo tanto es ocioso insistir en que se apliquen estas vacunas.

En tanto algunas recomendaciones en esencia básicas:
1. Higiene respiratoria: No detener estornudos con la mano, hacerlo con el hombro o el brazo.

2. Higiene de manos: Lavarse las manos varias veces al día, con agua y jabón

3. Higiene general: limpiar con un trapo humedecido en una solución esterilizarte (3/4 partes de agua y 1/4 parte de vinagre blanco; acido acético.) los teléfonos, manijas, teclados de computadoras, y cualquier superficie con la tengamos contacto en forma frecuente. No compartir cubiertos, platos o vasos con personas enfermas.

4. Tomar muchos líquidos para mantener hidratadas y saludables nuestras mucosas respiratorias. Comer frutas y vegetales verdes para proveernos de vitamina C y A, y así mantener íntegras y saludables nuestras mucosas respiratorias

5. Evitar en lo posible sitios concurridos: cines, discos, etc.

6. Aunque los virus organismos complejos; ultrafiltrables, de algo podría ayudar el uso de tapabocas.

7. Mantenerse alejado de personas que tosan, estornuden o tengan catarro, que presenten síntomas.

8. Todas las personas que presenten los síntomas arriba señalados deben permanecer en su casa, y si acuden a la escuela o al trabajo, de inmediato pedirles que se retiren a su casa.

9. Todos los casos probables deben solicitar consulta médica inmediata y recibir tratamiento oportuno.

Realidad
Como ya hemos visto este virus es una particularidad de otro que ya conocíamos, la diferencia fundamental del virus que ahora está en algunos estados de la República y algunos otros países es que es altamente contagioso, por ser nuevo, basta con que se haya estado cerca de alguien infectado para que lo puedas albergar en tu cuerpo, y estadísticamente, si los contagiados se dispersan, el índice de contagio y mortandad también lo hace exponencialmente. Es por eso que el gobierno quiere por todos los medios evitar el contagio masivo, si controla este punto controlará también es que el índice de mortandad.

En el año 2007 Mexico, EUA y  Canadá realizaron un plan ante uan posible pandemia aviar y porcina, según Proceso el temor esta fundado. De acuerdo a lo señalado en el ASPAN.

¿Sí ya existía ese plan, firmado desde marzo de 2006 por la ASPAN, porque entonces el gobierno y los medios de comunicación no informan claramente la situación? Prefieren causar un caos, infundir el miedo en la sociedad por la manera en las que se dan a  conocer las medidas, un ejemplo: suspender las clases en las escuelas de un día para otro sin algún tipo de información previa que explique las cosas claramente.

Creo hay dos razones por las cuales el gobierno no dice toda la verdad, una es una cuestión médica y la otra, política.

Veamos la cuestión médica, es por de mas claro que existen condiciones materiales y sociales para que el virus se extienda tan rápidamente: la sobrepoblación y  la masificación de los lugares públicos, aunque también hay acusaciones sobre la negligencia para controlar y atender a los enfermos, no se puede salir ante las cámaras y explicar los primeros fallecimientos por influenza, no, se informara sólo hasta que salió de forma abrupta en los medios de comunicación la cifra de muertos.
La falta de recursos, la insuficiencia de doctores en las estancias de salud pública son el principal causante de estos descuidos. Si existiese una política de contratación de personal para que se atiendan de mejor manera a los trabajadores y sus familias la respuesta hubiera sido mucho más, si el PAN no utilizara con fines meramente propagandísticos y políticos los programas de seguridad social como “Oportunidades” o el “Seguro Popular”, estaríamos en un panorama totalmente distinto.

La cuestión política, por otro lado, es que el gobierno trata de desviar la atención de los trabajadores en el momento en que la violencia es incontrolable a causa del narcotráfico, el desempleo sigue aumentando y en un marco mas general, los efectos de la crisis se están sintiendo en todo su apogeo. En realidad el gobierno no hace más que jugar con los sentimientos de la población, y esto no lo decimos por las medidas tomadas, sino la forma en la que se maneja la información y la manera de utilizan las medidas. (A propósito de esto, ¿alguien recuerda un personaje llamado Chupacabras?), y lo que genera esto es desorientación y desconfianza e incluso rabia de la gente pues ya no le cree al gobierno. Pareciera que para el gobierno es preferible causar un pánico generalizado y con esto paralizar momentáneamente las luchas de los trabajadores.  

¿Se tiene la cura?
Lo primero que tenemos que aclarar es que, para ningún tipo de virus existe una cura como tal ni siquiera para esas gripes pasajeras, lo que sí existe son medicamentos –virales- que ayudan a disminuir los efectos del virus y nuestro cuerpo pueda defenderse con mayor fuerza

El gobierno ha dicho que se tiene esta medicina (!!) y que se utilizará, aunque no está claro que sea la cura como tal, por el hecho de que este virus es nuevo en el mundo. Se ha dicho que tienen  $ 6,000,000,000 pesos para poder atender esta crisis, pero detengámonos un momento, esto quiere decir que esos medicamentos tendrán que ser comprados a una gran cadena internacional de medicamentos (Pfizer, por ejemplo), cuando se podría ahora mismo, poner a trabajar a los médicos, laboratorios, bacteriólogos para encontrar la sustancia activa de esos medicamentos, reproducirlos en masa para y aplicarlos a  toda la población. Pero de esto, no se dice una palabra. No hay que quitar el dedo del renglón en este punto, esta es una cuestión importante, no puede estar por encima de la seguridad de miles o millones, por la seguridad de nosotros, los intereses una firma farmacéutica o laboratorios privados.

Cada cuerpo reacciona de manera diferente y en realidad, siempre que se introduce a nuestro cuerpo un virus cualquiera, ha de pasar un tiempo para que nuestro cuerpo reaccione y desarrolle anticuerpos contra el virus y así se inmunice. Lo más probable es que el cuerpo de las personas que hasta ahora han fallecido, no hayan resistieron las primeras reacciones de la infección, a causa de un bajo rendimiento inmunológico (niños y ancianos algunos inmunodeprimidos: enfermos de SIDA o diabetes. La pobreza diezma al cuerpo humano, lo hace presa fácil de infecciones y contagios, desembocando, en muchas ocasiones en resultados fatales.

Política y economía; los costos para Calderón
En La Jornada del 26 del Abril se leer lo siguiente: “Es claro, por lo demás, que la crisis sanitaria que hoy se vive en México y en algunas regiones de Estados Unidos constituye en sí misma un factor de riesgo para la economía nacional y mundial: vale la pena recordar las estimaciones realizadas el año pasado por el Banco Mundial, en el sentido de que una pandemia de influenza significaría la pérdida de unos tres billones de dólares y redundaría en una caída cercana a 5 por ciento del producto interno bruto global.”

De forma cínica escuchamos a Javier Lozano Secretario del Trabajo y Previsión Social, pedir a los empresarios que no descuenten dinero a sus trabajadores si éstos llegasen a faltar por la enfermedad. A eso se limita el gobierno, a pedir “comprensión” en lugar de emitir en el Diario Oficial un apoyo real de gastos de medicinas y respeto del 100% del salario, o en caso de fallecimiento el gobierno indemnice de por vida a la familia.

Otra más, si al El Gobierno Federal estuviera verdaderamente comprometido con nosotros, la población, para impedir que los estragos por esta epidemia sean mayores, al igual que lo hizo con el sistema educativo, debería decretar un paro de labores para evitar exponer a millones de trabajadores en el DF y el Edomex; sin embargo, tal como lo expresó el propio secretario del Trabajo en la conferencia de prensa de este sábado, se limitaro a pedirle a los patrones “compresión” y “tolerancia” si es que un trabajador, se ve obligado a llegar tarde a su trabajo o de plano a ausentarse a causa de la enfermedad, por supuesto los patronos no entenderán el tan esmerado llamado del Secretario. Esto ee traduce en poner por encima de todo, incluso sobre la salud de millones de nosotros, los intereses y beneficios de los empresarios y la relevancia que adquiere es estremecedora cuando, como lo reconoció el propio secretario de Salud, la mayoría de victimas por la epidemia son las personas en “edad productiva” (sic). Las inexistentes medidas en el plano laboral ante esta epidemia, expresan toda la hipocresía del Estado, así como quien defiende los intereses de cada clase definen a los mismos.

Pero lo que si se contempla en el Diario Oficial de la Federación es un decreto donde se permite ingresar a todo tipo casa o local para controlar la epidemia, tomar las medidas “necesarias” para evitar congregaciones de personas, incluyendo con esto el cierre de locales, esperando así, evitar eficazmente los contagios, pero parece que no, por el contrario lo que estaríamos sentando es un precedente muy grave para violar las garantías individuales y derecho de asociación, evitar así organizar a la gente en pequeños comités de vecinos en los barrios y sindicatos, en coordinación con trabajadores de la seguridad social para revisar, dar seguimiento a enfermos y detectar algún brote de epidemia, esto seria una medida mas eficaz, pero aquí se presenta un oscuro peligro para el gobierno: la organización independiente de los trabajadores, como tras los sismos de 1985, que involucraron a miles y miles de jóvenes y trabajadores. Sumémosle  ya por ultimo, es una excelente oportunidad para poner todo tipo de trabas para la realización de la marcha del Primero de Mayo, la cual se esta en medio de feroces ataques para los intereses de los trabajadores.

El sistema de Salud Pública
No es un hecho casual, un accidente, tampoco se trata de un castigo como los narrados en la Biblia lo el Valle de México padece, es a causa de la crisis sanitaria que vivimos. Aunque ya afecta en mayor o menor medida a la mitad del territorio nacional esto tiene su explicación en las condiciones materiales, la política que ha venido impulsado desde 1983 cuando, de manera gradual pero sistemática, se empezó a reducir el gasto del Estado destinado a la salud pública.

¿Cuanto? Veamos: el año 2000, se destinó una cantidad equivalente al 5.8% del PIB para la salud: IMSS, ISSSTE y Secretaría de Salud, este porcentaje ya entonces limitado, Argentina y Uruguay destinaron en promedio el 8% para salubridad pública, en 2003 apenas se llegó al 2.8% del PIB. Cualquier país desarrollado, destina en media 18% de su PIB, podemos deducir fácilmente que lo destinado en México es demasiado poco.

Remitirnos a un caso en particular nos dará un sentido de la proporción, veamos el IMSS; en el 2004 su presupuesto era de 139 mil 721 millones de pesos, para el 2005 127 mil 592 millones de pesos; en el 2006 cayo a 113 mil 757 millones. Sumemos: en dos años ha sufrido un recorte de mas de 25 mil millones de pesos.

Pero sus directivos parecen estar satisfechos  pues en el 2006 se le condono a los  empresarios 13.5 millones de pesos por cuotas no cubiertas. Pero no existen limites a el cinismo este 22 de abril, el IMSS decidió condonar otros 50 millones de pesos en cartera vencida a mil 500 empresas, todo en plena epidemia.

Monopolios farmacéuticos y privatización de la medicina
Esto parece nunca acabar, un factor que inevitablemente distancia cada vez a mas mexicanos de los servicios médicos son los monopolios de las medicinas. El desmantelamiento del sistema de salud pública, es directamente proporcional a el rango de maniobra y más mercado para las instituciones privadas, el seguro se hace débil, el sector privado hace su Agosto. Mientras que en el país el porcentaje al sector salud es alrededor del 2% del PIB, cerca del 4% del PIB corresponde a  la medicina privada (familias sin seguro y que han de comprar sus medicamentos), sólo cubre al 25% de la población total del país tiene este servicio, el 75% ha de cubrir sus gastos. Pero no hay mucho problema en México existen 220 laboratorios de los cuales escoger, entre todos hacen una producción anual de  12 mil 500 millones de dólares. Lastima que solo 10 de estos 220 detenten el 90% del mercado nacional. Pero las cosas no mejoran mucho cuando vemos que las firmas farmacéuticas logran la obscena cantidad de 322 mil millones de dólares al año a nivel mundial ocupando el 58.4% del mercado.

La salud: un problema
Sufrimos una crisis sanitaria y a causa de la epidemia de influenza provocada por un nuevo virus, se ve reflejada en su intensidad. Vemos como el régimen y la burguesía se han encargado de gradualmente ir haciendo de la salud un privilegio. Por cada trabajador que gozan de seguridad social, están 3 abandonados a su suerte. Pero incluso los que estén afiliados tienen que padecer todos los días un servicio deficiente y saturado. El buen servicio existe, pero está en las instituciones privadas y cuesta tanto que se trata de un sistema que queda más que lejos del alcance de la mayoría.
Se me ocurre una ultima reflexión ¿cómo explicar que México esté padeciendo esta epidemia cuando, según la Secretaria de Salud, la industria farmacéutica de nuestro país, el lugar número 9 en todo el mundo, y la primera en toda Latinoamérica? Por supuesto no se vale decir que la industria esta prácticamente en su totalidad en manos de trasnacionales, eso ya se sabe, pues  las ganancias anuales llegan a los 10 mil millones de dólares, cifra nada discreta para no ser tomada en cuenta. Así vemos como las necesidades sociales en el capitalismo, solo corresponden a ganancia de los empresarios, aunque ello requiera sacrificar a miles y miles, millones.

Esta contradicción detener una industria farmacéutica tan fuerte y el problema real que vivimos ejemplifica de manera muy clara la política real del Estado,  así como sus a los servicios de salud.

La memoria siempre nos salva; el 1918 fue azotado por una pandemia de influenza, en México hubo 500 mil muertos. Al parecer nos han arrebatado nuestro derecho a la salud y tenemos que actuar ante ello  o pagar un costo muy elevado por ello.

Estado de ánimo: Reflexivo
Escuchando: Silvio Rodríguez – El Necio

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